Tataki Rosé

Láminas finas de res de primera calidad selladas al estilo japonés, bañadas en una reducción sedosa de frutos rojos y vino rosado. Decorado con microgreens, pétalos comestibles y un delicado toque cítrico para un final fresco y elegante.

Porciones: 4

Tiempo total: 25 minutos

350 kcal aprox. por porción

Ingredientes

Para el tataki:

  • 500 g de lomo de res de excelente calidad (Angus o Wagyu)
  • 2 cdas de aceite de oliva extra virgen
  • 1 cdita de sal marina en escamas
  • Pimienta negra recién molida

Para la salsa rosada de frutos rojos:

  • 150 g de frutos rojos frescos (frambuesa, fresa, arándano)
  • 100 ml de vino rosado seco
  • 1 cda de miel de agave
  • 1 cdita de vinagre balsámico blanco
  • Sal y pimienta rosa al gusto

Decoración:

  • Pétalos comestibles (rosas, pensamientos, begonia)
  • Microgreens o brotes tiernos
  • Ralladura fina de limón amarillo

Preparación

1. Tempera y sazona la carne

Saca la carne del refrigerador 20 minutos antes para que alcance temperatura ambiente. Sazona con sal marina y pimienta negra recién molida.

2. Sella estilo tataki

Calienta el aceite en una sartén muy caliente. Sella la carne por todos los lados durante 30–40 segundos cada uno, manteniendo el centro crudo. Enfría rápidamente sobre un plato con hielo para detener la cocción.

3. Prepara la salsa rosada

En una sartén pequeña, coloca los frutos rojos junto con el vino rosado y la miel. Cocina a fuego medio hasta que el líquido se reduzca a la mitad. Añade el vinagre balsámico, sal y pimienta rosa. Tritura y cuela para obtener una salsa fina y sedosa.

4. Filetea y monta

Corta la carne en láminas finas y disponlas en un plato grande y plano. Baña con la salsa rosada, decora con microgreens, pétalos comestibles y un toque de ralladura de limón.

5. Sirve inmediatamente

Ideal como entrada para un menú degustación o como plato principal ligero acompañado de un vino rosado fresco.

Tip de la Abuela 

Para que el tataki conserve su color rojo intenso y su jugosidad, sella la carne muy fría y manipúlala lo menos posible. Si quieres un corte perfecto y sin desgarres, métela 10 minutos al congelador antes de filetear.

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